Ah, el otoño. La temporada de los cafés con leche con especias de calabaza, de las hojas dignas de Instagram y de la excusa perfecta para transformar tu sala de estar en un acogedor refugio.
Si estás lista para dejar atrás las vibraciones del verano y sumergirte de cabeza en la estética otoñal, abróchate el cinturón, cariño: ¡estamos a punto de hacer que tu sala de estar sea tan otoñal que hasta las ardillas estarán celosas!
1. Adopta colores cálidos (porque el beige es cosa del pasado)
¡Es hora de pintar la ciudad de rojo... y naranja, y marrón! Según las tendencias del Color del Año de Pantone , los tonos cálidos están de moda. Piensa en cojines de color naranja quemado que harán que tu sofá luzca más atractivo que un café con leche con especias de calabaza, cortinas de color rojo intenso que gritan "Netflix y relax" y detalles en marrón cálido que harán que tu habitación sea más acogedora que la guarida de un oso.
2. Aplica capas de texturas (o cómo hacer que tu habitación sea más agradable al tacto)
El otoño es sinónimo de darle un toque de tacto a la decoración. Coloca una manta de punto grueso en tu sofá que sea tan acogedora que pondrá celosas a las ovejas. Agrega una alfombra de felpa que te hará contemplar una nueva vida como hippie descalzo. Y no olvides esos cojines decorativos de terciopelo: son el equivalente en decoración a un cálido abrazo de tu abuela.
3. Aporta la generosidad de la naturaleza (sin la suciedad propiamente dicha)
Saca a relucir tu lado más salvaje y busca elementos naturales. Las flores secas, las piñas y las hojas de colores son como el confeti de la Madre Naturaleza. Colócalas en un cuenco rústico de madera o en una cesta tejida para conseguir un encanto otoñal instantáneo. ¡Puntos extra si puedes hacerte con algunas calabazas pequeñas sin que te pille el granjero!
4. Crea ambiente con iluminación (porque nadie luce bien con fluorescentes)
Deshazte de esas luces intensas del techo más rápido de lo que puedes decir "calabaza con especias". Opta por bombillas suaves y de tonos cálidos que harán que todos parezcan brillar con el resplandor de mil hojas otoñales. ¿Y velas? ¡Oh, cariño, cuantas más, mejor! Crea un santuario de velas perfumadas que harán que tu habitación huela como un paraíso otoñal.
5. Cómo hacer que tu asiento sea más cómodo (o cómo no volver a levantarte del sofá)
Transforma tu asiento en un nido tan acogedor que necesitarás un grupo de búsqueda para encontrarlo cuando llegue la primavera. Almohadas de gran tamaño, mantas de piel sintética y tal vez hasta un sillón puf para cuando la vida adulta se vuelva demasiado difícil. Tu sofá debería lucir como si hubiera sido atacado por el Hada de la Comodidad.
6. Muestra tus favoritos de otoño (también conocido como alardear humildemente de tu obsesión otoñal)
Muestra tu amor eterno por el otoño como si fuera tu trabajo. Organiza ingeniosamente una colección de calabazas decorativas que harían llorar de alegría a Linus de Peanuts . Apila mantas acogedoras como si te estuvieras preparando para la próxima era glacial. Enmarca esa impresión de "Vive, ríe, deja" sin una pizca de ironía.
7. No olvides los aromas (porque tu nariz también quiere participar)
Seamos realistas, si tu habitación no huele como si hubieras estado horneando pasteles durante tres días seguidos, ¿estás viviendo el otoño como es debido? Invierte en algunas velas o difusores con aroma otoñal que harán que tus vecinos se pregunten si has abierto una panadería clandestina. Canela, especias de manzana, pastel de calabaza... si huele como si pudiera provocarte diabetes, estás en el camino correcto.
En conclusión: Caen con fuerza las hojas de otoño
Armada con estas fantásticas ideas otoñales, tu sala de estar está a punto de convertirse en el lugar más acogedor de este lado de la cueva de hibernación de un oso. Así que toma tu PSL, ponte tu suéter favorito (ya sabes, el que tiene parches en los codos) y prepárate para caer más fuerte que una manzana muy madura de un árbol. ¡Tu muro de Instagram no sabrá qué lo golpeó!
